Desde el 6 de febrero de 2003 es el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina, que se celebra cada año para sensibilizar al público acerca de esa práctica. La mutilación genital femenina, del tipo que sea, se considera una práctica dañina y una violación de los derechos humanos de las niñas y las mujeres. La OMS se ha comprometido a eliminar la mutilación genital femenina en el plazo de una generación, y a ese efecto realiza actividades de divulgación, investigación y orientación dirigidas a los profesionales de la salud y los sistemas de salud. Se consideran mutilaciones genitales femeninas todos los procedimientos que entrañen la ablación parcial o total de los genitales externos femeninos o la lesión de los órganos genitales femeninos que no respondan a razones médicas. La mutilación genital femenina carece de beneficios conocidos para la salud. Antes bien, se asocia a una serie de riesgos a corto y largo plazo para la salud física, mental y sexual, y para el bienestar. La mutilación genital femenina afecta a alrededor de 140 millones de niñas y mujeres, y cada año más de 3 millones de niñas corren riesgo de sufrirla. La OMS dedica este año una atención especial a la preocupante tendencia de que sean los propios prestadores de atención de salud quienes realicen la mutilación genital femenina, contribuyendo de ese modo a legitimizarla y mantenerla.
Fuente: Organización Mundial de la Salud