Nuestra Señora del Monte Carmelo,
referida comúnmente como Virgen del
Carmen o Nuestra Señora del
Carmen, es una de las diversas advocaciones de la Virgen María. Su
denominación procede del llamado Monte Carmelo, en Israel, un nombre que deriva
de la palabra Karmel o Al-Karem y que se podría traducir
como 'jardín'. Existen hoy en activo órdenes carmelitas repartidas por todo el
mundo, masculinas y femeninas, las cuales giran en torno a esta figura mariana.
En España es
patrona del mar y de la
Armada Española. También lo es del Ejército de los Andes, que
liderado por el general José de San Martín, gestó la independencia de Argentina,
Chile y Perú. Es considerada Reina y Patrona de Chile, de sus Fuerzas Armadas y
de Carabineros de Chile; es patrona de la Policía Nacional
de los colombianos, los transportadores en Colombia; en el Perú es “Patrona del
Criollismo” y "Alcaldesa de la
Ciudad de Lima"; en Bolivia es la patrona de la Nación y de sus Fuerzas
Armadas; y en Venezuela es la patrona del Ejército.
Esta advocación
da nombre a todas aquellas personas que se llaman Carmen, Carmela
o Carmelo, celebrando su
onomástica el día de la fiesta de esta Virgen, el 16 de julio.
Según la
tradición, durante la celebración de Pentecostés, algunos fieles que
investigaban la vida de los profetas Elías y Eliseo en el Monte Carmelo, actual
Israel, fueron convertidos al catolicismo tras la aparición de una nube en la
que iba una imagen de María. En ese monte, fundaron un templo en honor a la Virgen y la congregación de
los Hermanos de Santa María del Monte Carmelo, la que pasó a Europa en el siglo
XIII luego de su persecución en Tierra Santa.
El 16 de julio
de 1251, la imagen de la Virgen
del Carmen se le habría aparecido a San Simón Stock, superior general de la Orden, al que le entregó sus
hábitos y el escapulario, principal signo del culto mariano carmelita. Según es
tradición la Virgen
prometió liberar del Purgatorio a todas las almas que hayan vestido el
escapulario durante su vida, el sábado siguiente a la muerte de la persona y
llevarlos al cielo, creencia que ha sido respaldada por los Pontífices. La
iconografía principal de la Virgen
la muestra portando dicho escapulario.
La devoción mariana hacia la
Virgen del Carmen se extendió a muchos países de Europa y
América.