El
25 de junio de 1912 se produce la primera huelga agraria en el país ocurrida en
la provincia de Santa Fe, conocida como "Grito
de Alcorta".
El
Grito de Alcorta, que tuvo por epicentro a la localidad del mismo nombre, pero
que luego se extendió a toda la región pampeana, fue la rebelión de miles de
colonos apoyados por comerciantes, sacerdotes y profesionales, que reaccionaron
contra el sistema de arrendamiento y trabajo de la época. Esta gesta heroica de
los campesinos, fue simiente de la Federación Agraria Argentina (FAA).
Inspirados
en el lema de la revolución mexicana Zapatista: "La tierra para quien la
trabaja", la protesta marcó la irrupción de los colonos agrícolas en la
política nacional del Siglo XX, por lo que se la considera la primera huelga
agraria argentina.
Los
chacareros, en su gran mayoría arrendatarios inmigrantes, iniciaron ese año una
huelga por tiempo indeterminado en protesta por las malas condiciones de
contratación que los vinculaba con los grandes terratenientes.
El
paro de actividades comenzó el 25 de junio de 1912, tras una masiva asamblea de
colonos realizada en la Sociedad Italiana de Alcorta, durante la cual el anarquista
Francisco Bulzani (primer gestor del movimiento agrario), denunció la
angustiante situación que atravesaban los miles de campesinos de toda esa zona.
Los
chacareros denunciaban además la explotación a la que eran sometidos por la
firma Genoud, Benvenutto, Martelli y Cia, que administraba la colonia La Adela
y subarrendaba la tierra a 211 familias.
En
la histórica asamblea del 25 de junio, de la que participaron más de 2.000
agricultores de Alcorta, Bigand, Bombal, Carreras, Firmat y San Urbano (Melincué),
se aprobó por unanimidad el nuevo modelo de contrato redactado por el abogado
rosarino Francisco Netri y se conformó una "Comisión de Huelga".
Mientras
el movimiento se extendía, y los patrones recorrían las chacras para convencer
a los huelguistas que reanudaran sus tareas bajo amenazas de desalojo, surgió
la necesidad de conformar una entidad capaz de agrupar, representar y defender
a los agricultores, algo de lo que se encargó Netri.
El
flamante asesor legal de los colonos convocó a una asamblea general con los
delegados de todas las localidades y la comisión veedora del gobierno de Santa
Fe, con el objetivo de fundar una institución para luchar por los derechos de
los agricultores.
El
1 de agosto de 1912, se fundó la FAA, cuya finalidad principal sería “conseguir
por todos los medios lícitos la mejora de la situación de los trabajadores del
campo, solidarizando sus esfuerzos, a fin de que las energías de todos,
defiendan los derechos de cada uno”, según datos del Museo de Alcorta.
A
fines de septiembre de 1912 y en virtud de la presión lograda con la huelga,
los agricultores retomaron sus tareas tras obtener ciertas mejoras en los
contratos con los terratenientes.
Entre
éstas figuraban “el 28 por ciento de la cosecha, en parva y troja y como salga,
el 6% de la chacra para pastoreo, libertades para contratar máquinas, para
comprar y para vender, contratos con una duración de tres años”.
Mientras
duró la huelga agraria, numerosos colonos fueron perseguidos y encarcelados, y
El grito de Alcorta reconoce como mártires a Francisco Netri, Francisco Mena y
Eduardo Barros, quienes fueron asesinados por ser impulsores del histórico
movimiento campesino.